Oraciones para niños

oraciones para niños

Las oraciones para niños son parte esencial del encaminamiento de los infantes por la senda de Nuestro Señor. Al realizar estas oraciones, los más pequeños toman consciencia de la importancia de agradecer al creador por todo lo recibido.

Si queremos enseñar a los niños a orar, entonces debemos ser personas que rezan. Para los niños es mucho más fácil y más natural porque tienen un corazón simple y se ponen espontáneamente en la onda de Dios.

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    Oraciones para niños cortas

    A continuación, compartiremos con nuestros lectores una colección de oraciones para niños que puedes enseñar a tus hijos.

    Oración para todo el día

    Todo el día,

    querido ángel,

    mantenme cerca de ti

    porque todavía soy un pequeñín.

    Acompáñame siempre en mi camino,

    guíame hacia la luz.

    Si los niños somos felices,

    Jesús también será feliz.

    Amén.

    Oración antes de jugar

    Bendice, Señor, nuestro juego.

    Ayúdanos a ser generosos y justos con todos.

    Extiende tu alegría en nuestros corazones,

    para asumir nuestros deberes con mayor buena voluntad.

    Amén.

    Oración por la obediencia

    No siempre Jesús, sigo tu ejemplo.

    Tú que siempre obedeciste a San José y a Nuestra Señora,

    hazme dócil y obediente

    a mis seres queridos y a mis superiores.

    Sobre todo, Jesús ayúdame a obedecer tus leyes,

    y sean mis pensamientos, mis palabras, mis acciones

    de acuerdo con tu deseo y tu voluntad.

    Amén.

    Oración por la escuela

    Te agradezco Señor por mi escuela,

    y por todos los que trabajan allí.

    Gracias por los profesores

    que me ayudan a aprender,

    Por el cocinero que prepara las comidas,

    por los trabajadores de la limpieza

    y por el vigilante que vigila y nos protege.

    Te doy las gracias por poder ir a la escuela todos los días,

    tengo más suerte que muchos otros niños

    que en muchas partes del mundo no tienen escuelas a las que ir

    y puede que no reciban la educación adecuada.

    Te doy las gracias en el nombre de Jesús.

    Amén.

    niño rezando una oracion

    Cómo enseñarle a orar a un niño

    Todos deseamos que nuestros hijos puedan cultivar una intensa vida de oración y una relación con Jesús. A  continuación, conocerás cuáles son las acciones que nosotros, como padres, debemos llevar a cabo.

    La importancia del ejemplo

    Lo primero que hay que recordar es que nuestros hijos aprenden con el ejemplo. Así que lo primero que debemos preguntarnos es: ¿tenemos, ante todo, una vida de oración sincera y regular? Si no lo hacemos, será extremadamente difícil enseñarle a orar a nuestros hijos.

    Transmitir un método de oración

    Nuestro ejemplo debe enseñarles no sólo la importancia de orar, sino también transmitirles un método de oración. Orar es mucho más que repetir de memoria unas oraciones aprendidas. Orar significa vivir una relación personal con Jesús, y nuestros hijos necesitan verse incluidos en una relación viva con Él.

    Una manera de hacer esto es orar por ellos en voz alta con palabras libres. Si los niños son pequeños, es una buena idea orar por ellos a la hora de acostarse, sentarse a su lado y poner la mano sobre ellos, pidiendo a Dios que los bendiga, los guíe y los proteja. Así les estarás enseñando que Dios está vivo, real, presente y cuida de nosotros.

    Crear una rutina de oración

    Finalmente, establezcamos tradiciones familiares con respecto a la oración. Oremos juntos regularmente, involucrando a nuestros hijos. Incluso si los niños ya han crecido, es posible invitarlos a unirse a sus padres en oración.

    Algunos ejemplos son dar las gracias antes de las comidas, una breve oración antes de comenzar un viaje, o la oración por la tarde o por la mañana.

    Por qué deben orar los niños

    Entre las principales responsabilidades del padre cristiano está la de enseñar a orar a sus hijos. Pero, ¿por qué debemos enseñar a los niños a dar testimonio de su propia vida de oración?

    La oración permite la ascensión de nuestra voz a la presencia de Dios. Si queremos recibir el don de la oración, entonces debemos dispuestos a practicar la humildad. Ya sea que el niño lo sepa o no, la oración esta una comunicación con Dios.

    Rezar es vivir habitualmente en la presencia de Dios. Este acto de fe, ejercido de forma voluntaria nos pone cara a cara, corazón a corazón con Él. Gracias a la oración, la antorcha de Fe, recibida en el Bautismo, se mantiene con vida.

    1. Cayo Bardalez dice:

      Por favor ruego a Dios la Sanación física y emocional de mi sobrino Matthew Roff . Que le quite el temor o fobia a los truenos , rayos y tempestades. Haz un Milagro Dios para mi sobrino.
      Estoy seguro que sanará por tu misericordia.
      Gracias Dios. Amén
      Tuyo eternamente agradecido
      Cayo Bardalez

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